Los Peques de San Cándido ofrece un modelo educativo basado en pedagogías activas donde se potencia la curiosidad, el descubrimiento, la experimentación y el juego vivencial, de tal manera que el aprendizaje se convierte en un proceso activo y creativo.
«Nuestro proyecto se centra en el propio niño y nuestra labor se desarrolla por y para cada uno de nuestros alumnos, teniendo como base siempre su evolución biológica y psicológica, con el objetivo de proporcionar bienestar físico y emocional». El centro de educación infantil tiene como referencia un proyecto intergeneracional basado en el respeto y la interacción, con el fin de normalizar el proceso de envejecimiento de las personas mayores, visibilizar la diversidad funcional y romper con el edadismo. «La pandemia ha hecho que ambos colectivos, especialmente vulnerables, estén en estos momentos distanciados, y por ello nos encontramos en un momento de creación e innovación».
Otra de sus propuestas pedagógicas las desarrollan a través de las instalaciones de juego. Estas composiciones artísticas forman un verdadero ecosistema lúdico organizado y diseñado por el adulto, con una intencionalidad clara, «donde a través de una propuesta estética específica provocamos la libertad de juego y acción de los peques. Contamos con protocolos de actuación que garantizan las medidas sanitarias establecidas, además de un equipo de enfermería para ofrecer toda la seguridad y el bienestar necesario del alumnado y sus familias. El modelo organizativo del centro está estructurado en grupos estables de convivencia, formado por un número reducido de alumnos y una tutora de referencia. Para facilitar la comunicación e intercambio de información con las familias trabajamos con una APP donde diariamente consultan la actividad del centro».
«Nuestro equipo docente ha sabido adaptar todas las propuestas educativas al momento actual ofreciendo una educación de calidad y superando las barreras que la pandemia ha perpetrado en el desarrollo integral de los más pequeños».